Desde mediados del siglo pasado, Cuba ha sido una autocracia comunista, la dictadura personalista de los Castro, actualmente es una ideocracia, dictadura del partido único narco-comunista y en el futuro corre un alto riesgo de convertirse en una plutocracia, régimen autoritario basado en las fortunas acumuladas por los jerarcas del régimen.

Cuando el comunismo se enraíza en una sociedad, provoca su ruina moral, social, política y económica, es decir, su completa destrucción estructural.

En el caso de nuestra hermana Cuba, le será imposible recuperarse para alcanzar una democracia, digna de ese nombre, sin la aplicación de un programa de transición política en el medio plazo, desarrollado con la cooperación de una coalición de naciones democráticas.

A corto plazo, es imprescindible que organismos internacionales procedan a una inmediata intervención humanitaria que se desarrolle en ausencia de cualquier tipo de represión política.

Avizor

Julio, 2021