EL SEMANAL DEL COVARRUBIAS – 04 DE ABRIL DE 2023 – MIGUEL ÁNGEL SANZ

EL SEMANAL DEL COVARRUBIAS – 04 DE ABRIL DE 2023 – MIGUEL ÁNGEL SANZ

AGENDA 2030 (III): TRASFONDO ATROPOLÓGICO.

 

En los últimos días, la Agenda 2030 ha vuelto a ser “trending topic” en Twitter a causa de unas palabras del ex ministro del PP García Margallo, en las que aseguraba que “La Agenda 2030 es el Evangelio”.

Quisiera comenzar señalando que la Agenda 2030 tiene una naturaleza aristocrática: son las propias instituciones y con carácter mundial las que la promueven. No es en absoluto un movimiento popular. Son las oligarquías políticas -y no políticas- quienes la promueven. Los 17 objetivos de desarrollo sostenible (ODS) son herramientas para justificar la intervención del poder político sobre los gobernados, obviando la voluntad de estos.

Esas oligarquías usan de su poder e influencia con voluntad catequética: ellos son los que nos enseñan cómo hemos de pensar y actuar. Caen así en la fatal arrogancia de creer que saben lo que nos conviene, como bien diría Friedrich Hayek.

Lamentablemente, esta oligarquía incluye al actual Papa:
“Lo dramático de toda esta situación de exclusión e inequidad, con sus claras consecuencias, me lleva junto a todo el pueblo cristiano y a tantos otros a tomar conciencia también de mi grave responsabilidad al respecto, por lo cual alzo mi voz, junto a la de todos aquellos que anhelan soluciones urgentes y efectivas. La adopción de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible en la Cumbre mundial que iniciará hoy mismo, es una importante señal de esperanza. Confío también que la Conferencia de París sobre el cambio climático logre acuerdos fundamentales y eficaces.” (Discurso del Papa Francisco ante la Asamblea de las Naciones Unidas en 2015).

Las ideologías dominantes en la agenda 2030 son la de género y la climática. Y esto supone un cambio antropológico.

El cristianismo siempre ha defendido el cuidado de la tierra y la creación. Y esta defensa no es por la naturaleza en sí, sino porque la naturaleza es un don de Dios. La tierra es un don de Dios al hombre y debemos cuidarla. El mensaje bíblico es que Dios nos dio la creación para su explotación y nuestros propios fines.

“Creó, pues, Dios al ser humano a imagen suya, a imagen de Dios le creó, macho y hembra los creó. Y Dios los bendijo y les dijo: «Sed fecundos y multiplicaos y henchid la tierra y sometedla; mandad en los peces del mar y en las aves de los cielos y en todo animal que serpea sobre la tierra.»” (Génesis 1, 27-28).

El trasfondo antropológico de la Agenda 2030 es el contrario: no es que la tierra nos pertenezca, somos nosotros quienes pertenecemos a la tierra. El paradigma moral del ecologismo político actual es cuidar del planeta en sí mismo, no por ser un bien moral que ayuda al hombre.
Para la Agenda 2030, el hombre es un ser vivo más de la creación, y no la cima de ella. Para muchos ecologistas actuales el hombre es una plaga y causante de todo este desastre. El hombre tiene una altísima dignidad porque ha sido creado a imagen de Dios. El Hombre, después de los ángeles, es la criatura más excelsa y no es una plaga en absoluto.

No podemos sustituir la moral cristiana por una moral ecológica. El motivo por el que los cristianos cuidamos el paisaje, no ensuciamos, etc. no es por cuidar el planeta, es por nuestra virtud y por caridad con el prójimo.

Del mismo modo, más que fomentar un deseo altruista de que salgan de la pobreza personas que están a miles de kilómetros de nosotros, procuramos ejercer las 7 obras de misericordia espirituales y las 7 corporales con aquellas personas que tenemos a nuestro alrededor en el día a día.

A un amigo mío, muy preocupado por el CO2 y por el planeta que vamos a dejar a nuestros hijos, le explicaba lo que a mí más me preocupa del planeta que estamos dejando a nuestros hijos:

  • Me preocupa la deuda pública: en España, cada niño nace con 30.000 € de deuda. Y si es en una familia que paga más impuestos que la media, puede ser el doble o el triple de esa cantidad.
  • Me preocupa dejarles con políticos que les van a quitar el 50% el fruto de su salario nada más empezar a trabajar.
  • Me preocupa dejarles un sistema de pensiones piramidal fallido.
  • Me preocupa dejarles con políticos que suman decenas de miles de funcionarios extra cada pocos meses. Y que siguen creando más y más estructuras de colocación para amigos y afiliados y que van a lastrar el trabajo y los impuestos de nuestros hijos de por vida.
  • Me preocupa dejarles con políticos que con una rígida legislación laboral y de todo tipo cercenan la libertad personal y económica. Y que ahuyentan las inversiones, que son las deberían dar trabajo a nuestros hijos.

Todo eso me preocupa mucho más que el CO2.

 

Miguel Ángel Sanz
Doctor Ingeniero Industrial por la Universidad de Oviedo, MBA por INSEAD y graduado en Teología por la Universidad de Deusto.

 

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«PENSANDO EN VOZ ALTA» DE AVIZOR: GALLOS ALFA, GALLINAS BETA Y VICEVERSA

En la actual coalición de gobierno en España se viene reproduciendo una etología de granja avícola, que muchos creíamos circunscrita a los sempiternos caciquismos regionales. Quizás debiéramos considerar que el proceso de democratización de la sociedad española, iniciado en la Transición, se detuvo ya hace tiempo y que estamos inmersos en una regresión política que nos ha llevado a un adanismo político primario, que está sustituyendo la madurez democrática constructiva por la adolescencia autoritaria destructiva.

Hemos transitado desde un presidencialismo controlado y matizado por las instituciones y el Estado de Derecho a una auténtica granja de la posdemocracia, en la que el poder político se reparte entre dos gallos alfa y sus respectivas gallinas beta, que forman la coalición de gobierno con la inestimable ayuda de hambrientos zorros de toda clase de pelaje. El gallo alfa rojo se pone morado con las gallinas beta moradas y preside la coalición rojo-morada, mientras el gallo alfa morado se pone rojo de ira al tener que cabalgar contradicciones de algunas gallinas beta. Para colmo, una gallina beta de blanco plumaje, pero de incierto color, está clueca, lo que pone en serio riesgo la cría de puesta electoral. Para los no iniciados en los misterios avícolas, debemos aclarar que una gallina se denomina clueca cuando se empeña en empollar sus huevos independientemente de que estos hayan sido fecundados o no por el gallo. Finalmente se ha formado un peculiar cuadrilátero político en el que rivalizan dos gallos alfa y sus correspondientes gallinas beta, en cruzado y en paralelo, lo que podría llegar a complicarse todavía más si, en uso de su propia legislación, ambos y ambas adoptasen un sexo fluido, intercambiándose gallo por gallina y viceversa, eso sí, de forma discontinua.

En toda esa delirante ceremonia de la confusión, los polluelos, léase los votantes, reciben ofertas políticas de sus alfa-betas que son ejemplos de libro de grano gratis para hoy y hambre, sudor y lágrimas para mañana, que podríamos calificar de populismo de último minuto. Confío en que ante un espectáculo tan poco edificante como el que nos ofrecen los gallos y gallinas, dizque adultos, los polluelos, más allá de su filiación, reaccionen como adultos reclamando el que se ponga freno a una funesta involución democrática que no se merecen.

 

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